El texto, en el que ANV votó abstención, exige a la banda terrorista que "desaparezca, se disuelva y entregue las armas"
Con abucheos y acusaciones de "cínica" fue recibida ayer la alusión que la portavoz de ANV en el Ayuntamiento de Pamplona, Mariné Pueyo, hizo a sus "convicciones democráticas". Las críticas llegaron de los asientos del público en el pleno extraordinario convocado para condenar el asesinato de Isaías Carrasco Miguel, ex concejal socialista de Mondragón, tiroteado por ETA.
Pero también las escuchó la concejal de boca del restos de los grupos municipales, que pidieron su aislamiento político por no condenar los asesinatos (UPN), y acusaron a su partido de protagonizar "la más triste y negra historia de España" y de ser "la vergüenza de este país" (PSN). Desde NaBai se hizo un llamamiento a "plantar cara a ETA". Los tres grupos suscribieron una moción de condena del último asesinato de ETA. ANV volvió a abstenerse.
Jose Iribas (UPN) rechazó que el asesinato pueda justificarse nuevamente por el denominado conflicto político. "Sólo ETA y su entorno son los culpables y sólo a ellos hay que combatir con la ley y sin contraprestaciones", dijo. De cara a la jornada electoral de mañana, el edil reclamó el uso de la fuerza de los votos "para responder a quienes pretendían boicotear las elecciones".
Especialmente crítica fue la intervención de la portavoz del PSN, Maite Esporrín, que reconoció tener el corazón destrozado: "No nos van a amedrentar, ni siquiera quienes justifican a los asesinos y siembran el odio entre los jóvenes". "No piden tanto la independiencia, ¿por qué no se independizan de ETA?", recriminó a ANV.
Uxue Barkos (NaBai) calificó de "especialmente amargo" el asesinato de Isaías Carrasco, pero aseguró que no deseaban escenificar una lucha partidaria en torno a su persona, aunque acudirán a las concentraciones que se convoquen.
Entre otras afirmaciones, Mariné Pueyo (ANV) dijo que lo ocurrido "podía haberse evitado, pero alguien desde el poder lo ha impedido".
© DIARIO DE NAVARRA. Queda prohibida toda reproducción sin permiso escrito de la empresa a los efectos del artículo 32.1, párrafo segundo, de la Ley de Propiedad Intelectual