Sólo fue necesario cortar la carretera a San Miguel de Aralar y no se registraron incidencias en la red viaria
Las primeras nieves del invierno cayeron ayer en buena parte del norte y centro de Navarra. Lo hicieron acompañadas de tormentas de granizo, vientos de hasta 70 km/h, que evitaron en muchos puntos que la nieve cuajara, y un descenso de temperaturas de más de 15 grados con respecto al domingo.
En Pamplona, el termómetro sólo alcanzó los 4,4º, y también se registraron tormentas de nieve y granizo, tanto por la mañana como por la noche. Pese esta conjunción de elementos que hizo del de ayer un día muy desapacible en Navarra, no hubo incidentes que resaltar y salvo la carretera que sube a San Miguel de Aralar, no fue necesario cortar vías.
El norte de Navarra fue el más castigado por la nieve. En la zona de Burguete y Roncesvalles, se acumularon unos 15 centímetros, y en Belagua fue necesario el uso de cadenas.En Leitzaran, varias tormentas de granizo cubrieron de blanco la carretera, pero el tráfico fue fluido por la AP-15, salvo en algunos momentos a la altura de las ventas de Muguiro y en las proximidades de Latasa y Urritza, donde fue necesario detener por momentos el tránsito.
También la autovía de la Barranca y Burunda (A-10) se vio afectada, aunque en menor medida, por el temporal de ayer. Desde Irurtzun hasta Lakuntza, el carril interior acabó cubierto por una fina lámina de nieve sobre la una y media de la tarde. En el centro también se vieron chubascos de nieve y granizo. En la Ribera, el protagonista fue el viento, con rachas de hasta 74 km/h. En Estella también sopló con fuerza, a 70 km/h.
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