La colección de Stuart Vevers para Loewe se completa con bolsos y zapatos de piel
ESTÁ considerado una de las grandes promesas del mundo de la moda: Stuart Vevers, el nuevo diseñador de la firma española de lujo Loewe, presenta sus propuestas en los desfiles prt- a-porterd Otoño-Invierno 2008 de París.
En sólo dos meses el británico ha ideado una notable pequeña colección con vestidos de noche de varias capas y con los más delicados encajes negros, así como modernas chaquetas de piel de gran caída en colores luminosos, faldas de piel en amarillo pálido y elegantes abrigos con un toque masculino. Y como no podía ser de otra forma, numerosos bolsos y zapatos. No en vano Loewe figura como una de las mejores manufacturas en piel del mundo.
Vevers responde al desafío. El "milagro" de Mulberry contribuyó con sus creaciones a que la distinguida marca inglesa de bolsos se estableciera como un producto de culto entre jóvenes y modernos.
Larga experiencia
Pero antes, el británico ya se labró un nombre trabajando entre otros para Calvin Klein, Bottega Veneta o Givenchy. Vivió en Nueva York, en París y en Londres, y ahora se ha trasladado a Madrid, un poco más alejado del corazón del mundo de la moda.
Los bolsos recuerdan a las modelos tradicionales de Loewe pero dan la impresión de ser más ligeros y desenfadados, en una combinación poco usual de colores y con candados de colores chillones en la correa. Elegantes y estrechas botas se rematan con un tacón en forma de bombilla. Es para "una mujer adulta, sexy, fuerte y sin embargo juguetona", describe Vevers.
En tanto, en los desfiles se vieron los nuevos trabajos de Alexander McQueen, que mostró una colección extremadamente repleta de fantasía y muy elaborada.
Se ha dejado inspirar por un viaje a India y por imágenes de la época colonial británica. De ahí surgen espléndidos bordados en vestidos negros con crinolina y largas faldas de bailarina de varias capas con magníficas diademas.
© DIARIO DE NAVARRA. Queda prohibida toda reproducción sin permiso escrito de la empresa a los efectos del artículo 32.1, párrafo segundo, de la Ley de Propiedad Intelectual