La primera parada en Larraga. A las diez y media de la mañana, un grupo de siete vecinos de Oteiza hizo su primer alto en el camino hacia Javier en el Bar El Poste. Durante media hora aprovecharon para recobrar el aliento y tomaron un aperitivo que supuso una breve pausa, para muchos de ellos necesaria, antes de retomar la marcha hacia Tafalla, donde tenían previsto comer.
La noche la pasaron en San Martín de Unx, en donde se les unirían más vecinos de la localidad. Hasta entonces, la ruta la completaron Angelines Torrecilla López de Dicastillo, María Jesús Urbiola Landa, Meli Elvira Luciriaga, Carlos Portillo Martínez, Miguel Ángel Portillo Lardiés, Jesús Morentin Moreno y Patricio Goicoechea de Miguel.
Para este último es el quinto año consecutivo que realiza el camino. "Creo que me mueve la devoción y las promesas que nos hacemos personalmente. Además pasamos muy buenos ratos aunque nos duelan los pies. A pesar de esto, nunca me han salido ampollas y siempre he completado todas las etapas", comentó el vecino de Oteiza. A su compañera de peregrinación Meli Elvira también le empuja el sentimiento religioso. "Al principio fue la afición y ahora lo hago también por devoción. Pido para mis amigos y familiares, sobre todo, por mi padre que ha estado enfermo", afirmó.
Todos ellos hicieron hincapié en la buena climatología y Carlos Portillo fue el único que pronunció un pero. "Hace calor y hubiera preferido una temperatura más fresca para ir más cómodo", dijo.
© DIARIO DE NAVARRA. Queda prohibida toda reproducción sin permiso escrito de la empresa a los efectos del artículo 32.1, párrafo segundo, de la Ley de Propiedad Intelectual