Concentraciones de condena por los cuatro crímenes de violencia doméstica

Concentración de condena en el Instituto de la Mujer de Madrid. EFE

Una mujer de 32 años resultó herida grave tras haber recibido tres puñaladas en el vientre presuntamente por parte de su marido ayer por la mañana en su domicilio del Puerto de Pollensa (Mallorca). El suceso ocurrió a las 10.56 horas, cuando los agentes fueron avisados de que una mujer había sido agredida, presuntamente, por su marido, que nunca había sido denunciado por malos tratos.

La víctima fue encontrada en su domicilio con unas heridas que, según explicó ella misma, le había producido su marido, quien fue detenido a las 11.15 horas en las cercanías de la casa, dentro de su vehículo.

Al parecer, el arma que presuntamente habría usado para agredirle fue un cuchillo de cocina, según la Policía Local.

Por otro lado, una mujer de 33 años fue apuñalada el martes por la noche en la localidad pontevedresa de Poio por su compañero sentimental, de 36 años y que fue detenido tras fugarse del lugar de los hechos. La Guardia Civil recibió sobre las 21.00 horas una llamada alertando de que había una mujer herida en una rotonda en la zona de Campañó, en O Vao.

La víctima tenía una herida en el costado causada por un objeto punzante y, cuando fue recogida, ella misma manifestó que había sido agredida por su compañero sentimental, que fue localizado y detenido en O Vao ayer por la mañana. Sobre él pesaban dos órdenes de búsqueda y captura.

Minutos de silencio

"Más de 600 personas", según la Policía Local de El Puerto de Santa María (Cádiz), se concentraron ayer ante el ayuntamiento de este municipio, donde guardaron cuatro minutos de silencio, "uno por cada una de las víctimas" de violencia doméstica que se produjeron el martes.

Además de esta concentración, el presidente del Consejo General del Poder Judicial, Francisco José Hernando, y vocales de este órgano -como la presidenta del Observatorio Contra la Violencia de Género, Monserrat Comas- guardaron ayer un minuto de silencio en repulsa por la muerte, en Madrid, Valladolid, Puerto de Santa María y Cullera (Valencia), de las cuatro mujeres.