Patxi Ruiz presenció ayer el partido del Beotíbar en la grada. Admitió que pasó apuros al ver que a Olazabal-Lasa les costaba pasar la barrera de los seis tantos. Pero el estellés estaba preocupado por el estado de su derecha. Tiene un fuerte golpe en la base del dedo corazón, que está tratando con contrastes, fisioterapia y medios orientales. El pelotari se mostraba ayer pesimista con su presencia el próximo sábado en el Labrit. Quienes no tendrán ningún problema para estar en la primera jornada de la liguilla serán Oinatz Bengoetxea, recuperado de la distensión en el dorsal, y Abel Barriola, que no tiene problema alguno en el tobillo derecho. DDN
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