El magnífico regate del delantero de Cascante duró seis segundos y llegó después de un saque de banda
Seis segundos es lo que tardó Kike Sola en convertir un saque de banda en gol. Era el tercero, el de la tranquilidad. Corría el minuto 30 de la segunda parte y Perea despeja a saque de banda un balón colgado de Osasuna. Mientras tanto, Ziganda da instrucciones a Pandiani, que se dispone a relevar a Kike Sola. La casualidad quiso que Ziganda no hiciese el cambio en ese mismo momento y esperase a que Azpilicueta sacase de banda. Providencial.
El joven lateral rojillo saca con potencia buscando a Kike Sola, que peina hacia atrás, donde Juanfran tiene problemas para controlar el balón por el empujón que le da Perea por detrás.
A pesar de todo, Sola, que viene en carrera, recoge el balón, lo controla con la derecha y se interna en el área. El canterano rojillo se encuentra con Eller e intenta salir por su izquierda, pero se encuentra con Perea y busca la línea de fondo. Allí amaga de nuevo con otro cambio de orientación primero hacia dentro y luego hacia fuera y finalmente advierte la llegada de Font en carrera y le pasa el balón por entre los dos defensores. Jurado no advierte la llegada de Font y para cuando reacciona es tarde. El centrocampista remata a placer.
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