"Il bello", en la bici y la moda

Pasar varias horas montado en una bicicleta en una carrera profesional duele. Y duele más si uno está a punto de cumplir 41 años. Es el caso del velocista Mario "il bello" Cipollini, que ha regresado al ciclismo, tres años después, de la mano de un equipo que le permitirá una incursión en su otra gran pasión: la moda.

Hace tres años se marchó del ciclismo en la clásica Milán-San Remo. En su primera etapa en la Vuelta a California, el lunes, cedió 5:17 minutos respecto al vencedor, el argentino Juan José Haedo. "Estoy tan cansado...", acertó a decir al cruzar la meta de Santa Rosa.

Cipollini regresa de la mano del controvertido fabricante de vaqueros Mike Ball, que eligió el herido ciclismo para dar publicidad a sus prendas a través del equipo Rock Racing. Lo ha hecho recurriendo a su mediático amigo Cipollini y buscando el titular más fácil cuando de las dos ruedas se trata: el doping.

Al "ciclismo-espectáculo" de Ball le interesaba Cipollini. El italiano será su prolongación en la carretera y ya le asesora en sus negocio de pantalones vaqueros, que reporta cada año a Ball 500 millones de dólares.

Ball está encantado de contar a su lado con la presencia de "il bello", que en Italia ha sido investigado por evasión fiscal. "Es un buen amigo, me da buenos consejos. Seremos amigos para siempre. Este tipo es una verdadera estrella del rock. Yo tengo mis momentos, pero él me supera. Es fantástico, muy divertido", dijo el empresario estadounidense.