Mendi y Lagunak se medían en un duelo en el que perder significaba hundirse en la clasificación, y ganar, sobretodo para los locales, alejaba considerablemente a un rival directo por la permanencia. Así las cosas, el Mendi salió con más fuerza y durante los primeros minutos mantuvo a los de Barañáin dentro de su propio campo. Sin embargo, a pesar del dominio, no disfrutó de ocasiones claras de gol.
Conforme avanzaba el duelo, el Lagunak se sacudió el dominio, equilibando el juego y convirtiendo el partido en un toma, pero sin ocasionar peligro.
Tras la reanudación, el Mendi quería llevar la iniciativa y tocó más el balón en el medio del campo. En una de estas triangulaciones, el balón llegó a la banda derecha, donde Joaquín Mari, se fue con velocidad hacia la línea de fondo y puso un excelente centro que culminó de forma magistral Héctor, poniendo por delante a los de Mendigorría.
A falta de cinco minutos, cuando todo parecía abocado a la victoria local y la afición saboreaba el tercer triunfo del Mendi, el Lagunak sacaba partido de un barullo dentro del área, tras un corner que los rojillos no supieron despejar y ponía la igualada en el marcador. Incluso en una jugada posterior los amarillos pudieron llevarse el partido si Zabalza acierta a introducir el balón en una clara ocasión de gol. Con este resultado, y los de los demás rivales, los dos equipos tienen, al menos, la salvación un punto más cerca.
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