Actualizada 25/12/2011 a las 16:13
La Asamblea General de la ONU aprobó este sábado el presupuesto para la organización para los dos próximos años (2012-2013) de 5.150 millones de dólares (unos 3.950 millones de euros), lo que supone un recorte de un 5 por ciento con respecto al presupuesto bianual anterior. Es la segunda vez en el medio siglo de historia de la ONU que se reduce su presupuesto.
El secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, manifestó su satisfacción por la aprobación de este presupuesto y por la reducción de las partidas en un momento en que los principales estados están reduciendo su gasto y aplicando medidas de austeridad en respuesta a la crisis económica global.
"Estoy aquí para agradecerles que hayan consolidado, conmigo, nuestro consenso para aprovechar al máximo nuestros recursos (...) para seguir cumpliendo con cada uno de los mandatos fundamentales confiados a las Naciones Unidas", señaló Ban en su intervención ante la Asamblea.
Esta reducción de los 5.410 millones de 2010-2011 a los 5.150 millones del próximo presupuesto se ha logrado gracias a las maratonianas negociaciones entre las distintas delegaciones que se han extendido desde el viernes durante toda la noche y hasta bien entrado el sábado. Ya en la mañana del sábado se logró un acuerdo entre los países subdesarrollados, que abogaban por incrementar el gasto de los programas de desarrollo de la ONU, y los países ricos y principales contribuyentes, que se resistían a aportar más dinero.
El viceembajador de Estados Unidos ante la ONU, Joe Torsella, principal defensor de la reforma de la gestión del organismo multinacional, ha manifestado su satisfacción por la aprobación de "un presupuesto para una ONU más fuerte, más eficaz y más efectiva". Estados Unidos, como la principal economía mundial, aporta aproximadamente el 22 por ciento de los ingresos de la ONU.
Este presupuesto aprobado el sábado no incluye las partidas relativas a misiones de paz, que suponen más de 7.000 millones de dólares anuales, por lo que se deberá negociar este gasto más adelante. La financiación de estas misiones parte principalmente de aportaciones voluntarias de los países miembros.