Una
mujer de Jaca de 37 años, Marina Bandrés López Belio y su bebé de 7 meses, ambos
víctimas en el accidente del vuelo de Germanwings que hacía la ruta Barcelona-Düsseldorf,
tenía familiares en Pamplona, según confirmaron desde el Ayuntamiento de la localidad altoaragonesa.
El alcalde de Jaca, Víctor Barrio, se puso en contacto con la familia de la madre y el bebé de siete meses para mostrarles su pesar por la pérdida de sus seres queridos, según informaron desde el Consistorio jaqués.
Lo hizo telefónicamente porque el alcalde se encuentra en Valencia asistiendo a la inauguración de una exposición sobre el Santo Grial.
CONSTERNACIÓN EN JACA
La
ciudad oscense de Jaca quedó "consternada" por la muerte de la vecina y de su bebé de 7 meses, que viajaban en el accidente del avión siniestrado en los Alpes, en Francia.
El padre de la mujer había acompañado al aeropuerto a su hija y al bebé para coger el Airbus de la compañía Germanwings que, poco después, se estrelló con 150 personas a bordo, según explicó el regidor.
La familia de la mujer y el bebé es muy conocida en Jaca, donde regentan un taller de coches, según el alcalde.
Debido al poco tiempo que pasó desde el accidente y a que no se sabe cuándo va a ser posible recuperar los cadáveres, el consistorio aún no había decidido qué actos de duelo va a convocar pero, en cualquier caso, el alcalde aseguró que el consistorio se puso a total disposición de la familia.
En combinación con ella, agregó, se hará "lo que sea preciso", dijo emocionado.